Raponazo al Quindío 221022
Por Luis Fernando Jaramillo Arias.
¿Y alguien no dijo que eran 120 mil? Preguntó Lucho. En el presupuesto departamental figura una diferencia de esta cifra, pero con el embeleco del eje cafetero les plantearon la idea de la contribución regional para un hospital de cuarto nivel que están haciendo en Pereira; ahí nos arrancaron 30 mil millones más, dijo Diógenes; ¿Y en Armenia no están haciendo también un hospital de cuarto nivel? Insistió Pachito. No es que me oponga a ese progreso para nuestra ciudad hermana pero no veo por qué nosotros tengamos que arrancarnos la plata de la pepa del alma dizque para contribuir. Risaralda recibió un presupuesto un 71 % más alto que el de nosotros y ahora seguro será mucho mayor. Eso del eje hay que pensarlo más: La famosa RAP (Región Administrativa y de Planificación RAP) no puede tocar cosas como el aeropuerto o como la zona franca. ¡Lo ancho pa mí lo angosto pa vos!
El pasado 18 de octubre en horas de la tarde la polémica elevó su tono. Pachito blandía furibundo su teléfono con la noticia sobre la aprobación del presupuesto nacional en la cámara de representantes; ¿Qué estaban haciendo Piedad, Sandra Bibiana y Perea? ¿Estaban dormidos? Luchito lo trató de calmar porque lo veía rojo de la ira. Piedad hizo una defensa de la región, exigió respeto por el Quindío y manejó la cosa con decoro; ¿Y los otros dos? Increpó Pachito, todavía agitado. Diógenes respondió: Hay una cosa misteriosa que no puedo entender. Un representante a la Cámara es un parlamentario elegido en su departamento para defender los intereses regionales. El presupuesto aprobado fue muy lesivo para nuestra comarca. Entre el primero que se presentó y el segundo que se aprobó hay una diferencia de 90 mil millones de pesos menos que, en una apropiación cercana a los 500 mil, representan un “tumbis” de por lo menos el 18%. ¿Y la inflación que entre enero y agosto ya va el 10,08 %, insistió Pachito; nos vamos a ir casi a la mitad. ¡Seguro mordieron! ¡Quién sabe qué acuerdo hicieron! ¿Por qué son tan traicioneros con su región? Yo mismo oí una entrevista por Caracol en la que los tres de manera independiente decían que se sentían atropellados, que pedían respeto por el departamento. Vociferaciones hipócritas.
¿Y alguien no dijo que eran 120 mil? Preguntó Lucho. En el presupuesto departamental figura una diferencia de esta cifra, pero con el embeleco del eje cafetero les plantearon la idea de la contribución regional para un hospital de cuarto nivel que están haciendo en Pereira; ahí nos arrancaron 30 mil millones más, dijo Diógenes; ¿Y en Armenia no están haciendo también un hospital de cuarto nivel? Insistió Pachito. No es que me oponga a ese progreso para nuestra ciudad hermana pero no veo por qué nosotros tengamos que arrancarnos la plata de la pepa del alma dizque para contribuir. Risaralda recibió un presupuesto un 71 % más alto que el de nosotros y ahora seguro será mucho mayor. Eso del eje hay que pensarlo más: La famosa RAP (Región Administrativa y de Planificación RAP) no puede tocar cosas como el aeropuerto o como la zona franca. ¡Lo ancho pa mí lo angosto pa vos!
Muy crítica la situación, aceptó Diógenes. Hay voces airadas y con razón como la de Nicolás Castañeda el joven político. Denuncia el atropello a la región con nombres propios: Sandra Bibiana del partido liberal y Edgar Pérez de Cambio Radical votaron aprobando este maltrato con el Quindío. Un verdadero raponazo
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