Saturday, January 23, 2021

Administración Ríos. ¡No necesitamos plata! 210123

Mi amigo Pachito Alonso me invitó a tomar un tinto en el expendio que Amparo Rodas tiene en la Plaza de Bolívar de Armenia. Estaba desolado. Le pregunté; ¿Qué le pasa Pachito?

Mire Luis Fernando, Armenia es el único pueblo del mundo que se da el lujo de no recibirles plata a los ciudadanos; ¿Cómo es eso? Le pregunté.

Sí, yo voté por José Manuel Ríos en las elecciones que le ganó Carlos Mario Álvarez en 2016 porque me convenció con la patanería esa de Filosofín. En su campaña decía: “Yo no soy un títere, aquí necesitamos un gerente, un administrador, un alcalde que se dedique a buscar oportunidades, a generar el empleo, no a quitarle la plata del bolsillo a los ciudadanos, no a enriquecer a unos empresarios de otras ciudades, que traiga desarrollo, seguridad, empleo". Como ganó Álvarez, quedé con la frustración de haber perdido ese gerente de gran experiencia en el chance y en los bancos. Y pasó lo que pasó.

José Manuel repitió en 2019 y volví a votar por él y ¡Ganamos!, remató Pachito pero qué chasco. Resultó el títere de un señor Pareja Giraldo, el sobrino de Atilano, ese político de Génova[1]. Las oportunidades por ninguna parte; los empresarios de otras ciudades llenando sus bolsillos y consignando en los bancos de allá. Mire esta foto en la que una grúa de Pereira está trabajando en la construcción del paradero de Amable frente al hospital[2]. El empleo para los armenios por ninguna parte.

¿Y la seguridad? Le pregunté. Solo le voy a dar un ejemplo. Ayer un sicario mató una señora y dejó herido al chofer en un bus de Tinto, aquí mismo en el Barrio la Cecilia segunda etapa[3]. No se está seguro en ninguna parte. Robos y asesinatos todos los días.

¿Y el desarrollo? La ciudad parece tener un atractivo para que la gente venga e invierta, le dije. No sea iluso, me replicó Pachito. Ayer mismo salió un informe en el que nos cuentan que Armenia bajó del primer puesto el año pasado al puesto 19 en el indicador de precios de los predios urbanos[4]; ¡Vamos para atrás como el cangrejo! Remató Pachito.

Pero mire, me dijo. El alcalde es muy ejecutivo: Ya anunció el cobro coactivo de la contribución de Valorización para que la ciudadanía pague por las obras que no se han hecho: ¡Un verdadero portento! Con razón fue gerente del chance y de bancos. Pero por otra parte, en un gran gesto de generosidad y como para compensarle a los Armenios su idea de no sacarle la plata del bolsillo a los ciudadanos, a estas alturas y probablemente hasta más allá del 25 de enero, como para esperar la fecha en la que haremos remembranza del terremoto, no se reciben prediales. Las notarías están paradas, no hay transacciones, la parálisis del municipio es total. Ni siquiera tienen conciliadas las cuentas bancarias de la alcaldía, indicó, mientras me mostraba fotos[5] de los avisos que en las oficinas municipales anunciaban, uno tras otro, cuando se cumplía una de las fechas prometidas, que el despacho se demoraba un poco más.

Tomándome el tinto al que me invitó Pachito pensé: Es cierto, bajo la gerencia Ríos, Armenia se da el lujo de no recibirles plata a los ciudadanos. ¿Serán así los bancos y el chance?


[1] Hay referencias documentadas sobre la influencia del señor César Augusto Pareja Giraldo, a quien apellidan Toto, en los nombramientos y en la contratación de Armenia en este período. Las actividades del señor Pareja vienen desde la época de la exgobernadora Sandra Paola Hurtado

[2] Foto obtenida el pasado 19 de enero de 2021 




[3] Noticia registrada por el Reportero Steven en su página de Facebook

[4] Ha circulado un informe del DANE https://www.dane.gov.co/index.php/estadisticas-por-tema/precios-y-costos/indice-de-valoracion-predial-ivp

producido el 23 de diciembre en el que la ciudad alcanza un 2,81 de índice de Valor Predial (IVP) con el mayor deterioro en la posición, 1,81 puntos porcentuales por debajo del indicador promedio nacional, superando únicamente a Valledupar, Riohachayy Sincelejo por fracciones decimales.

[5]     Mensaje Whatsapp del pasado 20 de enero. “Estimado usuario, informamos que en razón al proceso de actualización de predios, actualmente no es posible generar el recibo de pago del impuesto predial unificado correspondiente al período gravable 2021. Nos encontramos trabajando arduamente para que a partir del 25 de enero se pueda generar su recibo de pago.”

 


Friday, January 15, 2021

¿Revocaroria? ¡No! 210115

Por Luis Fernando Jaramillo Arias

No faltan razones para pensar que la revocatoria del alcalde sería una solución para Armenia. José Manuel es mentiroso, comprometido en las tinieblas, pésimo ejecutor, inepto, pero buen trapecista. Podría pararse en los semáforos a mostrarnos la capacidad de la que ha hecho gala al pasarse del partido liberal al de la U, de allí a un Grupo Significativo de Ciudadanos para terminar como militante del partido MAIS. ¡Qué falta de consistencia ideológica! ¡Qué ciudadanía tan olvidadiza!  Se le reprochan actuaciones para cumplir deudas de campaña, incumplimiento del programa de gobierno, nombramientos de personajes oriundos de otros lugares, contratos mal hechos, decisiones erráticas, ceguera total. Nunca ha tenido voluntad de servir a la ciudad.

Quienes se empeñaron en revocar a Ríos deberían pensar en las consecuencias que se desencadenan de ese acto.

Si triunfa la revocatoria, mientras se producen las elecciones de nuevo alcalde tendríamos un encargado por el gobernador que ya demostró durante la suspensión de Ríos la incapacidad que tiene para generar este reemplazo porque también está comprometido hasta las narices con las castas políticas que tenemos que derrotar en el Quindío. ¿Otro Jorge Fernando Ospina Gómez aliado con algunos concejales tratando de meterle más goles a la ciudad? ¿Otra Claudia Milena Rivera Arévalo esperando un puesto en el ICBF? Y si no se alcanzan a hacer las elecciones atípicas para la selección del nuevo alcalde; ¿Otro orate del Partido MAIS? ¿Alguien peor que Oscar Castellanos? ¿Vemos eso justo con nuestra ciudad?

Hagamos cuentas: Primero se tendrían que conseguir por lo menos 8.740 firmas[1]. Después, se haría una votación en la que se tendría que lograr una mayoría con mínimo 23.933 ciudadanos[2] con una participación total de al menos 47.864[3]¿En qué forma se obtendrán las firmas? ¿Cómo se logrará esa movilización? ¿Quién asumirá los costos?

Conseguir estas cifras aún con el hastío que puede estar causando el desempeño del alcalde no es fácil. Y si no lo logran revocar, Ríos saldría fortalecido como salió fortalecido por un reintegro, no porque la Procuraduría lo hubiera exonerado sino porque lo notificaron de manera indebida y extemporánea. El paso de tortuga con uno adelante y otro atrás es la velocidad de los entes de control, José Manuel seguiría a empellones en la alcaldía y la burla con la ciudad continuaría.


Con la iniciativa de la revocatoria del Alcalde de Armenia no se producirán beneficios para la sociedad y “el remedio será peor que la enfermedad”.




[1] Según la ley electoral todavía vigente se deben allegar firmas por lo menos por el treinta por ciento (30%) de los votos obtenidos por el actual alcalde que consiguió 29.131

[2] El 40% de los votos válidos en la elección, que fueron 119.660

[3] Estos números variaron a otros con mayores exigencias con el nuevo código electoral aprobado por el congreso en sesión del 18 de diciembre de 2020. ¿En qué forma se obtendrán las firmas? ¿Cómo se logrará esa movilización? ¿Quién asumirá los costos?


Monday, January 04, 2021

2020 un número bonito 210102

Por Luis Fernando Jaramillo Arias

En audio https://youtu.be/P_ZzO1ZhjOM  (Imágenes de Google)

En la curiosidad sobre lo que podría significar un año con un número bonito como 2020, estuve indagando sobre los calendarios. Concluí que en el permanente girar del mundo, sus habitantes nos hemos impuesto medir nuestra vida en períodos que llamamos años que representan, fuera del ritmo del corazón y de los ritmos marciales y musicales, tal vez el ciclo más claramente identificado por los científicos desde la antigüedad. Existen muchos calendarios, entre ellos el calendario egipcio, el maya, el calendario juliano, el gregoriano que nos impuso el papa Gregorio XIII en 1582 hace 418 años gregorianos como los deberíamos llamar. Hasta existe el calendario Armenio[1], en la república asiática donde la historia sagrada dice que recaló Noé con su arca después del diluvio universal. Todas mediciones imprecisas, tanto que para cuadrar los años, cada cuatro hay un bisiesto con un 29 de febrero, pero aún así se hacen otros “cuadres”[2]. En conclusión, todo es relativo, impreciso, todo depende del lente con que se mire y se hace necesario mirar más allá de las narices.

El 2020, ese número bonito, llegó con la expectativa de revuelta que representaron los paros del 21 de noviembre de 2019 en todo el país; el año saludó a mi familia llevándose a esa vieja querida que era mi mamá y se despidió llevándose también a mi hermano mayor; se produjo la noticia de una explosión en Beirut Líbano[3]. Nos enteramos de que el avispón asesino del Japón llegó a los Estados Unidos y planteó una gran amenaza para las abejas domésticas; un brote de sarampión en América Latina, incendios forestales en Australia, inundaciones en Indonesia. Tampoco faltaron las noticias políticas: Las primeras actuaciones de los alcaldes de Armenia y Calarcá les valieron suspensiones de la Procuraduría; se inauguró el túnel de la línea; nuestro gobernador trabajó con entusiasmo y mucha promoción de sus actuaciones, pero comprometido con las castas políticas que deberíamos rechazar definitivamente; se produjo la derrota de Donald Trump en Estados Unidos y se llevaron a cabo unas sucias elecciones parlamentarias en Venezuela. En deportes, las noticias fueron la muerte de Diego Armando Maradona y la celebración de los 15 años de carrera de Lionel Messi en Barcelona con 627 goles.

Pero el hecho más notorio, sin duda fue la pandemia del coronavirus cuyo primer efecto fue la caída del precio del petróleo que hizo vislumbrar la posibilidad de que se acabe la era del petróleo sin acabarse el petróleo, así como se acabó la edad de piedra sin que se acabaran las piedras. Nos cambió la vida de un momento a otro. Encierro y muchas cosas nuevas. En tecnología, el año comenzó con la Feria CES 2020 en la que Samsung presentó su NEON, un ser humano artificial. Nos volvimos expertos en zoom, en meet, en teams, en reuniones por Whastapp. Las relaciones cambiaron de personales a virtuales, el sentir colectivo se volcó a priorizar la salud y el medio ambiente.

Un año como casi todos, con malas y buenas noticias pero un buen amigo[4] me hizo caer en cuenta de un adicional: El año del número bonito nos obligó a sacar conclusiones que nos implican mirar en mundo en prospectiva e identificar algunos puntos que se pueden analizar con diferentes ojos pero que no se pueden ignorar. Me voy a referir a cuatro:

1.- Las emisiones de CO2 que han acelerado el cambio climático debido al calentamiento global, causadas por el sistema de producción vigente bajaron el 7% debido al paro producido por la pandemia. Solucionarlo del todo pararía la economía; no hacerlo, daría al traste con la vida en el planeta.

2.- La exportación indiscriminada de puestos de trabajo y sectores críticos hacia China. Parar esta tendencia aumentaría los precios de los productos; no pararla es contemporizar con un sistema hipócrita en el que los países de occidente someten la economía en sus territorios a una serie de regulaciones que encarecen la producción pero toleran al mismo tiempo que ese país irrespete los derechos que pretenden proteger tales regulaciones mediante compras y fabricación “made in China”.

3.    3.- El futuro de los milenials, que se ocupan en la “economía itinerante”. Cambiar de un tajo
la perspectiva de la vida de los jóvenes los frustraría sin remedio pero mantenerla, con las altas exigencias de gasto que tienen pero sometidos a bajos salarios, los llevará a la presión de un endeudamiento o a la disminución del cumplimiento en los hábitos de pago.

4.    4.- La revolución del procesamiento de información, robotización, inteligencia artificial, aprendizaje de máquinas, impresión 3D y tecnologías 5G, que son imparables, eliminará muchos de los puestos de trabajo como hoy los concebimos y propiciará la aparición de muchas otras ocupaciones que todavía ni siquiera imaginamos. El balance está todavía por ver.

El 2020 es un número bonito que recordaremos porque nos previno hablándonos a gritos de los graves retos y peligros que acechan al mundo para que concluyamos que nuestro futuro va a depender de una adecuada conducción de la sociedad. Nuestro papel hoy es multiplicar este grito para que la dirigencia se prepare, mire más allá de las narices, tenga en cuenta y maneje con criterio estos temas que atendidos cegatonamente pueden alimentar la desigualdad y el resentimiento social para llevarnos a las aberrantes dictaduras del populismo.



[1] Este calendario del país de donde nuestro Armenia sacó su nombre, tenía un año de 365 días, 5 horas, 49 minutos y 12 segundos.

[2] En los años seculares, los que cierran un siglo que terminan en 00 o sea múltiplos de 100 como 1500, 1900 ó 2000, solo son bisiestos cuando se pueden dividir por 400. Por ejemplo 1800 y 1900 no fueron bisiestos y solo tendremos un cierre de siglo bisiesto en 2400.

[3]  Esta explosión dejó un balance de 160 muertos, 6.000 heridos y 300.000 personas sin hogar

[4] Entre muchos que me han sugerido temas en este sentido están Roberto Tisnés, Jorge Borrero, Reinerio Cuartas, Carlos Moreno, César Augusto Ángel, Carlos Julio Carmona, Darío Serna, Germán Jaramillo, Guillermo Upegui, María del Rocío Baena, Luis Fernando Herrera, José Camero. A ellos y a todos los que me han hecho sugerencias y comentarios les doy mi más cálido agradecimiento.