Saturday, September 11, 2021

El aguacate: Nuevo chivo expiatorio 210911

Por Luis Fernando Jaramillo Arias

Diógenes comentó: Me tiene aterrado el titular que sacó esta semana el Quindiano: “Director de la CRQ espera tener los estudios de rigor para tomar medidas contra los cultivos de aguacate en el Quindío” A primera vista, en el departamento vamos a declarar al aguacate “persona non grata”.

Pues claro, respondió Pachito. El aguacate está acabando con el agua y está haciendo carreteras en la montaña. ¡La CRQ tiene que actuar!

No se equivoque Pachito, le corrigió Diógenes; ¿Usted leyó el artículo completo? ¡Que va! Dijo Pacho, con el titular es suficiente. Es necesario que tomen medidas contra ese cultivo.

Si usted lo lee en detalle, el director de la Corporación Autónoma Regional del Quindío José Manuel Cortés Orozco dice que están esperando tener fundamento técnico para actuar en los casos de contravenciones a las normas ambientales, pero que ni se pueden satanizar los cultivos ni se puede actuar sin soporte. Su análisis es muy juicioso.

¡Pero son siembras masivas! Apuntó Pachito. ¿Le parece mucho 5.300 hectáreas de aguacate Hass? ¿Sabe cuántas hay en café? Más de 20.000, y nosotros estamos orgullosos de esa actividad y del paisaje cultural cafetero que las rodea, indicó Diógenes. ¿Qué hubiéramos hecho sin las carreteras, la electricidad y hasta la telefonía que instaló el Comité de Cafeteros en la segunda mitad del siglo 20?

Y agregó, los ecolomiopes nos están llenando de mentiras haciéndonos creer que los cultivos de aguacate Hass son malos. Lo que sí hay son malos cultivadores que cuando atentan contra el medio ambiente se deben sancionar con rigor, sea en aguacate, en café o en cualquier otro cultivo. Pero hay que saber que casi todos estos empresarios del campo son respetuosos y cumplen las normas. Para controlar eso está la CRQ para lograr que, de la mano de los verdaderos ecologistas, haya desarrollo en alianza con la naturaleza.

Adicionalmente, para atacar los cultivos de Hass, están desenterrando normas que se convierten en un obstáculo a las actividades que dan empleo y bienestar[1]. Con una ley de hace 60 años están llenando de incertidumbre a los empresarios del campo del departamento que son los que producen empleo, bienestar e impuestos para pagar la burocracia. Si no adaptan y ponen al día esa norma, tendríamos que desocupar las tierras de más de la mitad del Quindío, cerrar a Calarcá, Pijao, Génova, Córdoba, Buenavista y muy posiblemente Barcelona; ta
ponar las carreteras que cruzan la Cordillera y eliminar el túnel recién inaugurado porque están en la Zona de Reserva Forestal Central, que comprende 15 kilómetros en línea recta hacia los lados oriental y occidental de la parte alta de la Cordillera Central.

¡Huy! Replicó Pachito. ¿Y también nos van a cerrar la fonda donde nos tomamos los aguardienticos que podemos comprar gracias a que con los impuestos que pagan los empresarios nos pueden pagar la pensión?


[1] Ley 2 del 17 de enero de 1959 sobre Economía Forestal de la Nación y Conservación de Recursos Naturales Renovables para la protección de los suelos, las aguas y la vida silvestre. Esta ley creó la Zona de Reserva Forestal Central, comprendida en un área limitada a 15 kilómetros hacia los lados oriental y occidental del divorcio de aguas de la Cordillera Central, desde Cerro Bordoncillo, aproximadamente a 20 kilómetros al oriente de Pasto, hasta el Cerro de los Prados al Norte de Sonsón. La franja que esta ley prescribe representa el 52% de área del departamento del Quindío.